Es una papilla de continuación. Está ideada para criar manualmente, a partir del primer momento en que despuntan los cañones de las plumas, aquellas especies de loro que precisan dietas altas en grasa: yacos, guacamayos, eclectus, poicephalus... Contiene la grasa vegetal más indicada para estas especies: el aceite de palma. Contiene también papaya, favorecedora del tránsito digestivo. Se recomienda su uso hasta el momento de la emancipación. Por término medio los loros ingieren de 7 a 10 ml de papilla por cada 100 g de peso. Es conveniente asegurarse de que una hora antes de cada comida el buche del bebé esté completamente vacío. Aconsejamos suministrar la papilla con una jeringa con sonda blanda de goma virgen o silicona. Éste es el método que usamos en nuestro centro de cría por ser el más seguro y limpio. Recomendamos estimular al animal presionando las comisuras laterales del pico para provocar movimientos de deglución, antes de la introducción de la sonda.